Buenos días. Comienzo la semana compartiendo este poema de temática rutinaria y algo contagiado de hastío. Espero que lo disfruten más allá de su contenido.
Vuelve la luz de los sueños, luego de no haber dormido,
después de no haber despertado, colocando a cada cuál en su
sitio,
viene, abriéndose paso, inexorablemente lo mismo.
Suceden los días por el cansancio de las cosas,
deshojando ocasiones, deshabitando el cielo de estrellas.
Así, en la vigilia, soporte malogrado,
rigurosa costumbre por que pasan a ciegas
las cosas más bellas por el ojo humano
¿Hacia qué lado emprende el vuelo la gaviota?
¿Cuál destino augura a aquellos ríos?,¿ en qué mar
desembocará la espera?
Puede volver el
sueño, a sorprenderme despierta,
a esparcir de disimulo mis grietas
a matar el tiempo y con el tiempo al poeta.
Puede venir y visitarme la muerte
con su áspero perfume y su ahogada presencia.
Expropiar a la felicidad del deseo,
exiliarme del vacío de no tenerte
Y así, en la condena del sucederse,
esperaré con anhelo de sus labios consuelo
hasta verme arrojada a la luz de los sueños.
Teresa Velasco Castillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario