Dedico este poema a la gente de mi tierra, a los biznagueros que hacen arte y no lo saben...
El amor como esas siestas de verano
que dejan las ventanas empañadas,
los cristales del alma,
los sentidos
sus cálidas caricias al oído en la mañana
El amor como un volcán de versos
volcando su lava hacia el poema,
como la novia del pene que es la pena,
se cuentan los dolores que me encienden
El amor es ese tipo de persona
que siempre mira al vacío y no hace nada,
los olores más tristes y el sol más sonoro
que esconde un poeta en su mirada
El amor es una forma elemental de arte
y la practico hasta la náusea que provoca.
Es una droga que pago con mi cuerpo.
Es un sueño que despierto en cada cosa.
Es libertad y prisión en
misma boca.
Quiero, amor, que lo comprendas
que el amor son los años uno vive
y uno vive apenas un
epílogo.
Que el prólogo es la infancia que se olvida
y los años no vividos son la vida.
Teresa Velasco Castillo